Más de 100 reclusos en la prisión estatal de Folsom dieron positivo por el coronavirus y un empelado falleció en el último brote que golpeó el problemático sistema correccional de California.
La Asociación de Administradores de Instituciones de Libertad Condicional de California confirmó la tarde del miércoles que uno de sus empleados dio positivo por coronavirus. Había trabajado como guardia por 5 años.
La prisión, que está a 20 millas al noreste de Sacramento, informó que 89 reclusos tenían infecciones activas por COVID-19, según datos actualizados el miércoles por el Departamento de Correcciones y Rehabilitación de California.
La agencia publicó una actualización en su sitio web el martes diciendo que envió un "equipo de ataque" médico para responder al brote y también instaló tiendas de campaña para poner en cuarentena a los pacientes. También establecieron una instalación para detectar a personas potencialmente infectadas.
Casi 2,500 reclusos están encarcelados en la prisión de Folsom.
El peor brote hasta ahora ha sido en la Prisión Estatal de San Quintín, donde murieron 25 personas y más de 2,200 reclusos contrajeron el coronavirus. Durante el fin de semana, los funcionarios penitenciarios confirmaron la primera muerte de un guardia de la prisión de San Quíntin por coronavirus.
