Sacramento. — Furioso por las enormes ganancias de las compañías petroleras después de un verano de precios récord de la gasolina, el gobernador de California, Gavin Newsom, comenzará el lunes formalmente su campaña para castigar a los grandes productores al pedirle a la Legislatura que los multe y les otorgue el dinero de vuelta a los conductores.
Los legisladores estatales regresarán brevemente al Capitolio estatal el lunes para tomar juramento a los nuevos miembros y elegir líderes para la sesión legislativa de 2023. Pero este año, Newsom también convocó a los legisladores a una sesión especial con el fin de aprobar una sanción para las compañías petroleras cuando sus ganancias superen cierto umbral.
Seguramente será una propuesta popular entre los votantes, que han estado pagando más de $6 por galón de gasolina durante gran parte del año. Pero la gran pregunta es cómo los legisladores de California recibirán la medida, especialmente porque la industria petrolera es uno de los principales cabilderos y donantes de campaña del estado.
A la incertidumbre se suma una cantidad inusualmente alta de nuevos miembros que ocuparán escaños en la Legislatura por primera vez. Más de una cuarta parte de los 120 miembros de la Legislatura podrían ser nuevos, dependiendo del resultado de algunas contiendas reñidas en las que los funcionarios del condado todavía están contando los votos.
“Es como el primer día de clases y obtienes esta gran prueba de ética sobre un trabajo que nunca has tenido”, dijo Jamie Court, presidente de Consumer Watchdog, un grupo de defensa que se asoció con la administración de Newsom para respaldar el propuesta de gasolina
Entre los nuevos miembros del Senado estatal se encuentra Angelique Ashby, una demócrata que ganó su escaño por poco después de una intensa campaña. La industria petrolera gastó cientos de miles de dólares en anuncios de radio y televisión para apoyar la campaña de Ashby, una tendencia que notaron los críticos que intentaron usarla en su contra.
En una entrevista, Ashby dijo que no se le han acercado cabilderos u otras personas de la industria petrolera para preguntarle cómo votaría sobre una posible sanción para las compañías petroleras. Señaló que la industria petrolera gastó el dinero como "gastos independientes", lo que significa que no tenía control sobre ese gasto durante la campaña.
“Las campañas no son legislación, y los eslóganes y estrategias de campaña de mi oponente son cosa del pasado”, dijo Ashby, cuyo distrito incluye a Sacramento. “Estoy obsesionado con la gente del Distrito 8 del Senado y tomaré mi decisión en función de lo que sea mejor para ellos”.
Hasta el domingo por la noche, Newsom aún no había revelado su legislación y los líderes legislativos dijeron que probablemente no comenzarán las deliberaciones sobre ninguna propuesta hasta enero.
Pero la batalla ya ha comenzado. La semana pasada, la Comisión de Energía de California realizó una audiencia pública sobre por qué los precios de la gasolina en el estado son tan altos. Los precios de California se dispararon durante el verano, pero también lo hizo el resto del país, principalmente en respuesta a un aumento en el precio del petróleo crudo después de la invasión rusa de Ucrania.
Los precios de California se dispararon nuevamente en octubre, incluso cuando el precio del petróleo crudo cayó. En la primera semana de octubre, el precio promedio de un galón de gasolina en California fue $2.61 más alto que el promedio nacional, la diferencia más grande de la historia. Desde entonces, las compañías petroleras reportaron miles de millones de dólares en ganancias.
Los reguladores esperaban cuestionar las cinco grandes refinerías de petróleo del estado: Marathon, Valero, Phillips 66, PBF Energy y Chevron. Pero ningún funcionario de la compañía asistió a la audiencia y la mayoría dijo que compartir información podría violar las leyes antimonopolio.
Newsom trató de avergonzar públicamente a esas empresas, publicando un video en su cuenta de Twitter de sus asientos vacíos durante la audiencia del jueves.
“Las grandes petroleras están estafando a los californianos, y el silencio ensordecedor de la industria (en la audiencia pública) es la prueba más reciente de que se necesita una multa por aumento de precios para responsabilizarlos por especular a expensas de las familias de California”, dijo Newsom en un comunicado de prensa anunciando la sesión especial.
Catherine Reheis-Boyd, presidenta de la Asociación de Petróleo de los Estados Occidentales, dijo que la industria petrolera es volátil y señaló pérdidas de miles de millones de dólares durante la pandemia, cuando la demanda de gasolina se redujo drásticamente debido a que muchas personas trabajaron desde casa y cancelaron planes de viaje.
Durante la audiencia del jueves, culpó a los impuestos y regulaciones del estado por hacer subir los precios de la gasolina.
“El gobernador y la Legislatura deben concentrar sus esfuerzos en eliminar los obstáculos de las políticas que se imponen a la industria energética para que podamos concentrarnos en brindar energía asequible, confiable y con menos emisiones de carbono a todos los californianos”, dijo Reheis-Boyd.
Severin Borenstein, profesor de la Universidad de California-Berkeley, dijo que el problema no está en el nivel de la refinería de petróleo, sino en el nivel minorista donde se vende gasolina a los conductores.
El mercado de gasolina de California está dominado por la gasolina de marca, que es más cara, y los precios de la gasolina en el estado han sido consistentemente más altos que en el resto del país desde 2015, dijo Borenstein.
“Simplemente no tenemos la competencia y la disciplina de esas estaciones fuera de marca”, dijo.
