Sacramento. — Legisladores de California aprobaron el lunes las primeras sanciones en Estados Unidos contra la manipulación de precios de la gasolina, votando para darles a los reguladores el poder de castigar a las compañías petroleras por beneficiarse del tipo de aumentos de precios que asediaron al estado más poblado de la nación el verano pasado.
Los demócratas que controlan el Congreso estatal trabajaron rápidamente para aprobar la iniciativa el lunes, apenas una semana después de que el proyecto de ley fuera presentado. Fue un proceso inusualmente expedito para un tema controversial, en particular uno al que se opone la poderosa industria petrolera, que ha invertido millones de dólares para frenarlo.
El precio de la gasolina en el estado de California es uno de los más caros del país y una de las razones es la exigencia a las empresas petroleras de proveer una mezcla especial de gasolina que es menos perjudicial para el medio ambiente.
Aun así, los altos precios alcanzados en 2022 no tienen justificación, según explican las regulaciones estatales.
El gobernador, el demócrata Gavin Newsom, usó sus facultades políticas para aprobar la iniciativa, que surgió de su llamado en octubre pasado para que se realizara una sesión legislativa especial con el fin de aprobar un nuevo impuesto a las ganancias de las compañías petroleras, luego de que el precio promedio de la gasolina en la entidad impuso un récord de 1,70 dólares por litro (6,44 dólares por galón), según la Asociación Automovilística Estadounidense (AAA, por sus siglas en inglés).
Ir en contra de la industria petrolera ha sido una de las principales prioridades políticas de Newsom, quien es ampliamente considerado un posible candidato presidencial futuro.
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“Cuando vas tras las grandes compañías petroleras, por lo general te arrollan... eso es exactamente lo que le han estado haciendo a los consumidores durante años y años”, dijo Newsom a los reporteros después de la votación. “El Congreso tuvo el valor, la convicción y la resistencia para enfrentarse a las grandes petroleras”.
Se prevé que Newsom promulgue la ley el martes.
Los líderes legislativos rechazaron su llamamiento inicial a establecer un nuevo impuesto por temor a que pudiera desalentar el suministro y derivar en precios más elevados.
En lugar de ello, Newsom y los legisladores acordaron permitir que sea la Comisión de Energía de California la que decida cualquier posible sanción a las empresas petroleras por manipulación de precios.
La división conformada por expertos, economistas e investigadores, podrán exigir la presentación de datos e informes a refinerías y tendrá la facultad de remitir las infracciones ante la Justicia para que sean enjuiciadas.
La CEC establecerá una estructura de penalización que pueda impedir que las petroleras fijen precios excesivos y quienes excedan el margen permitido enfrentarán una multa civil.
Pero el punto esencial de la iniciativa no es una posible sanción, sino la enorme cantidad de nueva información que las petroleras se verían obligadas a revelar a los reguladores estatales sobre cómo determinan sus precios.
