El Procurador General Ken Paxton presentó una petición ante la Corte Suprema de Texas, solicitando que la corte obligue a los Secretarios de Votación Anticipada para los condados de Dallas, Cameron, El Paso, Harris y Travis a seguir la ley de Texas de las boletas que se envían por correo. La ley de Texas generalmente requiere el voto en persona, y permite la votación por correo para ciertos grupos limitados, incluyendo aquellos que están discapacitados. En violación de ese requisito, los funcionarios de esos condados están alentando a los votantes sin discapacidades reales a reclamar "discapacidad" en sus solicitudes de votación por correo.
"Cada aplicación incorrecta de la ley electoral de Texas daña la integridad de nuestras elecciones y aumenta el riesgo de fraude electoral. El voto en persona es la manera más segura de prevenir el fraude electoral y garantizar que cada elector es quien dice ser y tiene una oportunidad justa de emitir su voto", dijo el Procurador General Paxton. "Es desafortunado que ciertos funcionarios electorales de condado se hayan negado a cumplir con sus deberes y, en cambio, hayan ido ilegalmente más allá de la determinación de la Legislatura de quién es elegible para votar por correo. Mi oficina continuará defendiendo la integridad de las leyes electorales de Texas".
Aclaró que "discapacidad", que es el término que se utiliza en las disposiciones del Código Electoral de Texas que permiten votar por correo, significa una "enfermedad o condición física" que impide que un votante vote en persona el día de la elección sin una probabilidad de necesitar asistencia personal o de dañar la salud del votante.
Un votante enfermo con COVID-19 y que cumpla con esos requisitos puede solicitar una boleta por correo. Sin embargo, aclaró que el miedo a contraer COVID-19, sin embargo, es una reacción no física a la pandemia actual y no equivale a una enfermedad o condición física que califica a un votante para recibir una boleta por correo.